Desafío
4.
Conociendo
la historia de la Empresa “Bajo Techo” y siendo contratada como equipo de
asesor para tratar de solventar la situación que se les está presentando, y
sacar a flote el emprendimiento, me realizan las siguientes interrogantes:
¿Qué
recomendaría a la gente de “Bajo Techo”?
-
Describe las posibles soluciones que consideras aplicables.
-
¿Qué problemas reales observas en los clientes?
- ¿Qué decisión
debería tomar el equipo de “Bajo Techo”? ¿Pivotar, perseverar o abandonar?
¿Cómo lo harías?
En el mundo de los negocios, los cambios están a la orden del día, es un mundo
muy dinámico, por lo tanto, hay que estar en disposición de evaluación
constante de los emprendimientos, por esta razón es de suma importancia llevar
registros de todo lo que acontece, estar atentos y tomar la decisión más
acertada. Muchas veces pasamos por crisis en los negocios y son momentos en
donde tenemos que, en primer lugar, gestionar las emociones y canalizar cual es
la decisión más sabia para seguir produciendo, es así como, nos encontramos en
una encrucijada, una decisión que tomar entre abandonar lo que hacemos,
perseverar o pivotar.
Estoy siendo contratada como asesor para analizar
un caso del emprendimiento denominado “Bajo Techo”, este emprendimiento tiene
dos tipos de clientes, el propietario de algún espacio, llámese casa, galpón,
etc., que pone a disposición para rentar, el cual se denomina anfitrión, y el
usuario, que tiene necesidad de rentar espacios para guardar algo. Ambas partes
se conectan a través de la página web, en donde el propietario del espacio a
rentar se registra. Por su parte el usuario, solo tiene que ingresar a la
plataforma, buscar el espacio que mejor se acomode a sus necesidades, revisar
las condiciones y si está de acuerdo, enviar la solicitud al anfitrión
indicando que es lo que desea guardar o cual será el uso que le va a dar al
espacio, para evitar cualquier problema con el cliente. Todo pareciera muy
claro y transparente.
Con el paso del tiempo….
Los dueños de bajo techo sostienen que los números
no le daban, porque solo percibían el 15 % de la transacción y las rentas eran
bastantes económicas. Y los costos de operación y gastos crecían, pero no las
ganancias.
Por otro lado, los dueños de bajo techo sostienen
que las casas y oficinas no estaban hechas para guardar cosas y ni tampoco
tenían control sobre los espacios de almacenamientos ni sobre lo que los
clientes guardaban. Los propietarios de bajo techo buscando soluciones
contrataron publicistas, para apostar a mejorar, pero lo que hicieron fue
incurrir en más gastos sin encontrar la solución.
Aunque en las condiciones para contratar pareciera
todo muy claro y transparente estoy escuchando que los anfitriones y los
clientes no suministraban la información en total transparencia, porque escucho
que comenzaron a tener fricciones, pues los anfitriones decían no saber que se guarda
en sus espacios y los usuarios sentían desconfianza en cuanto a seguridad de
sus pertenencias guardadas, y del espacio que contrataban. Al igual que Airbnb,
supongo se debía hacer valoración y hablar de la reputación del usuario.
Es así como
me contactan para servir de asesor y darle una posible solución a lo que consideran
un problema.
Yo le recomendaría a los emprendedores de bajo techo realizar un pivote
de segmento de cliente, como podría ser, ofrecer los espacios para realizar
masajes, ejercicios, terapias, consultorios, centros educativos, etc. porque
con estos se garantizaría el mejor uso de las instalaciones y evitaría
fricciones y malos entendidos con los anfitriones, sin dejar de tomar en cuenta
la reputación y valoración que poseen. Y un
pivote de problema del cliente, en donde se profundice cuáles son las
necesidades objetivas de los clientes, para ofrecer más satisfacción, es de
recomendar a los dueños de bajo techo llevar registros de todo lo que acontece
para posteriormente evaluar si se obtiene mejores resultados con esta
propuesta.